La combinación de materiales fríos, como el metal, y cálidos, como la madera, es la seña de identidad de este apartamento de 170 m2 cuadrados situado en la orilla del lago suizo de Lugano. El estudio milanés dotdotdot se ha encargado de hacer a medida todo el mobiliario y gran parte de la decoración. En la amplia zona que ocupan la sala de estar y el comedor, un cubo de madera de abedul acoge los electrodomésticos de la cocina a la vez que camufla un pequeño aseo. Los reflejos de la luz natural sobre la madera fluyen desde la amplia terraza con vistas al lago.